Aunque parezca que el bichón maltés es una raza de moda, su existencia es una de las más antiguas de entre todas las razas caninas. En el año 300 a.C ya se encuentran menciones a perros de estas características que lo situaban en la cuenca del Mediterráneo Central, donde lo utilizaban como perro cazador de ratones y ratas en tiendas y bodegas de barcos.
No fue hasta la llegada del Imperio Romano, cuando el bichón maltés se fuera situando como uno de las razas favoritas entre las clases altas, convirtiéndose pronto en animal de compañía. Pero, sin duda, su popularidad entre las clases más altas no llegaría a consolidarse hasta el Renacimiento.
En la actualidad, esta es una raza que podemos encontrar con la misma frecuencia entre familias de todo tipo de razas, aunque sgue siendo de las preferidas a la hora de prensentarlas a concursos de belleza canina.
Fisionomía de un bichón maltés
La línea superior de un bichón maltés es recta, aunque la cruz sobresale ligeramente. No obstante, su grupa es ancha y alargada. Su pecho es amplio y profundo, cuyo esternón es alargado.
El bichón maltés presenta una cabeza ancha, ovoide si la observamos desde arriba y con la
parte superior aplanada. Cuenta, además, con un stop muy marcado que llega a formar un ánfulo de 90º.
Los ojos del bichón maltés son, quizás, uno de sus mayores signos de identidad, ya que son bien despiertos, circulares y de color ocre oscuro. Sus orejas, casi triangulares, son de inserción alta y colgantes.
El manto del bichón está compuesto por una sola manta de pelo espeso, lustroso, brillante y sedoso. Al poseer un pelo tan largo, este presenta una caída que va hasta el suelo. Para el estándar de la raza, el color blanco puro es el principal, aunque también se acepta el marfil pálido e, incluso, algunas manchas anaranjadas pálidas.
El carácter del bichón maltés
El bichón es un perro que cuenta con una gran inteligencia. Son perros que aprenden muy rápidamente a cambio de alguna golosina o algún juguete. Por lo tanto, educarles no debe suponer ningún problema para el propietario de algún ejemplar de esta raza. En su caso, siempre deberemos recurrir a métodos de educación canina positivos, es decir, basándonos en un sistema de recompensa, ya que el bichón maltés responde muy mal a los métodos tradicionales que recurren al castigo como método de corrección de comportamientos.
Además, suelen ser perros muy atentos y gentiles con los "miembros de su manada", así como muy juguetones y muy activos, por lo que, de nuevo, es interesante que el dueño de un perro de esta raza sea capaz de proporcionar al animal todo el nivel de actividad que requiera.
Junto a lo anterior, una de las características del bichón maltés es su facilidad de socialización, son perros muy amigables con la gente así como con otros perros. No obstante, como en la mayoría de las razas, es muy importante comenzar con el proceso de socialización lo antes posible pues, de no hacerlo podrían presentar conflictos con otros perros o con los niños.
Los bichones malteses son animales de compañía. Esto, que puede resultar una obviedad resulta muy literal en el caso de esta raza, que necesita sentirse acompañado. Por lo tanto, son el perro idóneo para una pareja que tenga tiempo que dedicarle y hacer ejercicio con él, y no son nada recomendables para personas que pasen mucho tiempo fuera de casa o no cuenten con tiempo para hacer algún tipo de ejercicio junto a su mascota.
Por lo tanto, son perros que, si no están bien socializados o se sienten solos, pueden llevar a cabo conductas destructivas o indeseadas, como ladrar excesivamente, llorar descontroladamente...
Salud y cuidados
Aunque se trata de una raza saludable, sí que pueden aparecer problemas de luxación patelar, fontalena abierta, hidrocefalias, disquiasis y entropión. Junto a la anteriores, aunque en menos medida, podemos encontrar casos de sordera dentro de los ejemplares de esta raza.
Cuidados del bichón maltés
El mayor cuidado de que debe llevarse a cabo con el bichón maltés tiene que ver con el cuidado del pelo del animal. Al ser muy largo tenderá a enredarse con facilidad, por lo que es fundamental llevar a cabo un cepillado diario del manto o, al menos, uno de cada dos días.
En el caso de los bichones que se exhiben en exposiciones caninas, es frecuente que se envuelva el pelo del animal para intentar protegerlo de la suciedad. Sin embargo, en el caso de los bichones de compañía, se suele optar por mantener el pelo corto, para evitar enredos o acumulación de suciedad. En cualquier caso, la frecuencia recomendada para el baño es de una vez por mes como mucho, aunque lo ideal es bañarlo, exclusivamente, cuando se encuscia.
Gracias a su pelaje, que presenta poca tendencia a la caída, el bichón es una raza idónea para las personas alérgicas.
En definitiva, el bichón maltés es un perro inteligente y divertido con el que podrás salir a dar largos paseos o canalizar su alta energía con algún tipo de juegos. Es un tipo de perro ideal para vivir tanto en un piso como en una casa grande, ya se encuentre en un pueblo o en una gran ciudad. Además es un perro al que le encanta estar cerca de su amo en todo momento y sentir su compañía, por lo que necesita un dueño que quiera compartir con él su tiempo y grandes ratos de diversión.
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