Educación canina: El clicker

Al mismo tiempo, no por hacer más veces clic vamos a conseguir mejores resultados. Acompañar al "click" y la comida de felicitaciones y alegría pueden diferenciar un buen comportamiento de otros menores. Nunca deberíamos hacer sonar al clicker más de una vez seguidas.

La semana pasada, os propusimos un interesantísimo artículo en el que aprendimos a diferenciar entre adiestramiento y educación en un perro. Estos conceptos, a pesar de ser diferentes, poseen un elemento en común, podemos llevarlas a cabo de manera positiva o negativa, según prefiramos premiar al perro ante una buena conducta o castigarle ante un mal comportamiento.

Pues bien, como ya dijimos en el atículo, desde Club Mascodín apoyamos siempre los métodos positivos a la hora de trabajar cualquiera de estas corrientes con nuestras mascotas. No sólo porque reprobamos cualquier tipo de conducta negativa hacia nuestras mascotas, sino porque utilizar métodos positivos resulta mucho más eficaz y fomenta nuestro vínculo con el animal.

Dentro de la educación en positivo del perro, una de las herramientas que suele utilizarse con mayor frecuencia es el clicker. 

Un clicker no es otra cosa que una cajita de plástico, que podrás encontrar en numerosas formas y colores que contiene una pequeña chapa de manera que, al presionarla, emite un sonido similar a un "click". De tal forma que, utilizado con corrección, nuestra mascota acabará asimilando ese sonido con algo positivo. 

Utilizando el clicker premiaremos a nuestro perro emitiendo un sonido que llevará asociado, a su vez, su jueguete favorito o un trozo de comida. Premiando de esta forma, frente a una caricia o a palabras de cariño, ganaremos en precisión, claridad, concentración, posibilidad de reforzar acciones lejanas y comodidad. 

El clicker puede ser utilizada con perros de todas la razas y edades, pudiendo emplear esta técnica para enseñar una cantidad indefinida de ejercicios. Además, utilizar esta herramienta para enseñar cualquier ejercicio hará que permanezca más tiempo en la memoria del animal, aunque esto no quita para que deba ser recordado con cierta frecuencia. 

A la hora de practicar tus ejercicios o enseñar alguno nuevo, es fundamental que las sesiones sean bien cortas, más aún si se trata de cachorros. Conseguirás mejores resultados llevando a cabo tres sesiones de cinco minutos que una hora, de las cuales tu mascota sólo estará concentrada durante cinco minutos, consiguiendo que nosotros como educadores nos frustremos y no disfrutemos de una sesión de juegos. Del mismo modo, resulta altamente eficaz dejar descansar al perro después de cada sesión, de manera que los conocimientos adquiridos se asienten en la mente del perro. Conseguirás más dejando que tu perro duerma una siesta después de una sesión de entrenamientos que llevándotelo a correr o a tomar algo a una cafetería. Aunque no lo creamos, enseñarte un truco o un ejercicio a nuestras mascotas con clicker les supone un esfuerzo mental y esto, al final, hace que nuestras mascotas se fatiguen. Por es fundamental que respetemos su descanso.

¿Cómo funciona el clicker?

A la hora de enfrentarte al clicker, debemos preparar los premios que asociaremos al

sonido. Buscar comida ligera que podamos partir en trocitos pequeños puede ser una buena opción, ya que no tendremos que esperar a que el perro tenga que masticarlo. Otra buena opción es reservar parte de su porción diaria de pienso y utilizarlo a modo de "chuche". También es interesante, espercialmente para perros que pueden distraerse fácilmente, que llevemos a cabo estas sesiones cuando el perro tenga algo de hambre. Nuestra mascota sentirá un mayor interés por la comida cuando haga horas que ha comido que inmediatamente después de comer. 

Muchos veréis utilizar un juguete como premio cuando se ha clickado. Esto es una opción absolutamente válida, pero siempre es recomendable, sobre todo al comienzo, utilizar comida, ya que nos aseguraremos de que el premio va a resultar interesante para nuestra mascota. Con el tiempo veremos qué juguete le puede gustar más y empezar a utilizarlo como premio.

Antes de empezar a enseñar trucos o ejercicios a nuestra mascota, deberemos "cargar el clicker". Esto consiste en hacer click y proporcionarle al perro una porción de comida. No hace falta que el animal esté haciendo algo concreto. Simplemente emitiremos el sonido y premiaremos. Repetiremos esto durante varias ocasiones durante un par de minutos o tres ya que, si no, sobrealimentaríamos al animal.

Deberemos repetir este ejercicio durante varios días, dejando pasar cada vez más tiempo entre click y click, de manera que, cuando veamos que al hacer sonar el clicker nuestra mascota nos mira directamente esperando la recompensa, sabremos que comienza a entender el funcionamiento del clicker. No os agobiéis si después de varios días no lo habéis conseguido, cada perro tiene un ritmo, sigue intentándolo.

Una vez hayamos conseguido que el perro entienda y tenga interés por el clicker, ya podremo enseñar todo tipo de trucos a nuestra mascota. 

¿Qué NO debemos hacer con el clicker?

Existen varios errores muy frecuentes entre la gente que practica con el clicker. Uno de ellos consiste en hacerlo sonar y no dar el premio. En cuanto se "clicka" deberemos proporcionar la comida al perro. De nada sirve hacer clic y dar el premio a los cinco minutos más que confundir a nuestra mascota.

Resulta igualmente importante saber cuando dejar el clicker. Deberemos ser capaces de ver cuando el perro está cansado o necesita subir el nivel de dificultad de un ejercicio. Una de las claves el éxito de este método es dejar siempre al animal con ganas de más, por ello deberemos enseñar los ejercicios desde la parte más fácil a la más difícil. Por ejemplo, si enseñamos a un perro a sentarse no podemos pretender que lo haga a distancia si no lo conseguimos con seguridad estando cerca.

Tampoco debemos convertir el clicker en un comando. Usar el clicker como modo de llamar la atención del perro o que acuda a nosotros le hará perder el valor reforzante del mismo.

Y, por último, jamás deberás asociar el clicker a algo negativo. Si estamos cansados, nos frustramos porque no nos sale algo, lo mejor que podemos hacer es dejarlo y esperar a un momento mejor. El clicker debe ser siempre algo apetecible, nunca grites o regañes a tu mascota si no os sale algo, seguramente es que el perro no te esté entendiendo, ten paciencia y piensa una manera más sencilla de conseguir que haga lo que buscas.

Si no entendéis cualquier cosa de las aquí explicadas no te preocupes, muy pronto os traeremos una serie de vídeos en la que os enseñaremos cómo utilizar el clicker y a llevar a cabo una serie de trucos alucinantes.