El perro y la ropa: cómo enseñar a tu mascota a tolerar la ropa

Hoy en día nuestras mascotas están más que integradas en nuestras familias, de ahí que muchos de nosotros acabemos humanizando a nuestros perritos. Esta práctica puede resultar más negativa que positiva en cuanto al comportamiento del perro pero esto no significa que, de vez en cuando, no le podamos proporcionar un caprichito.

No obstante, son muchas las mascotas que resultan especialmente sensibles a las bajas temperaturas y, por supuesto, nuestra raza de la semana, junto a los Chihuahuas, es una de las razas que más temen al frío. De ahí que, muchos propietarios, no duden en ponerle a sus perros algún tipo de ropa que les ayude a sobrellevar mejor el duro invierno.

En cualquier caso, para algunos propietarios ponerle cualquier tipo de prenda a sus mascotas resulta una verdadera odisea, de ahí que os dejemos algunos consejos para facilitaros la tarea.

Primeros Pasos

A la hora de enseñar a nuestro perro cualquier cosa, siempre es mejor empezar desde

cachorro. Durante los primeros meses de vida, los perros tienen una gran curiosidad ante las cosas nuevas y muy poco miedo a la hora de afrontarlas. Por eso es fundamental aprovechar este periodo en la vida del perro para enseñarle todo lo que podamos, siempre sin forzarle ni atosigarle.

En cualquier caso, independientemente de su edad, siempre es recomendable empezar con ropa fácil de usar y que sea cómoda. Busca ropa que no le cubra las patas traseras, los pies o la cabeza y que deje el estómago abierto.

Una vez le coloque la primera prenda, enséñele que lo que está viviendo es una experiencia positiva, felicítele e, incluso, prémiele con sus chuches favoritas. Esto distraerá su atención olvidándose de que lleva nada puesto. Comience colocándole la ropa durante un par de segundos o tres y prémiele. Con el tiempo iremos aumentando la permanencia, dándole los premios cada vez con menor frecuencia.

Aumentando el armario

Lo siguiente que podemos hacer es ir probando con ropa más difícil de llevar. Podemos empezar por algún jersey que implique que el perro tenga que pasar su cabeza por el agujero. Intente sujetar un premio con una mano mientras que desliza la prenda por la cabeza con la otra. En cuanto lo haya conseguido quíteselo y pruebe de nuevo hasta que vea que el cachorro lo ve como algo normal. Puede seguir este método para acostumbrarle a introducir las patas en las mangas.

Para ponerle cosas en el pelo puede seguir este mismo método, comience dejándoselo muy poco tiempo y premiándolo con mucha frecuencia para ir dejando que pase cada vez más tiempo entre premio y premio.

Ropa, ¿vestir o no vestir?

A la hora de enfrentarse al dilema acerca de vestir al animal debemos ser pacientes con nuestra mascota. Vestirse no es una actividad natural para él por lo que no es de extrañar que pueda reaccionar con miedo o desconfianza ante este nuevo reto.

Si bien es cierto que existen muchos perros que agradecen la protección de un buen abrigo, en caso de que veamos que nuestro perro es reacio a vestirse, siempre es mejor dejarlo. Nunca debemos forzarle a hacer algo que no desee pues podremos generar desconfianza hacia nosotros.

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