Conoce tu raza: el Husky Siberiano

Origen de la raza

El origen del Husky Siberiano puede situarse en Siberia, donde sería empleado como animal de guardia y tranporte por lo esquimales. En 1908 empezaría a ser trasladado desde Siberia hasta Alaska, donde se ganó su popularidad como perro de trineo, ya que llegaba a ser incluso más rápido que el Malamute.

En 1925, todos los perros de trineo se convertirían en héroes al empezar a utilizarse como transporte de medicinas destinadas a combatir la difteria hata Nome, una población islada por el mal clima. Este hecho, es conmemorado todos los años en la carrera de trineos de Iditarod.



No sería hasta 1930 cuando el gobierno de la Unión Soviética cerrara las fronteras siberianas al comercio exterior, por lo que los huskies dejaron de exportarse al resto del mundo. Así que, la mayoría de las líneas americanas actuales son descendientes de los perros importados en esa fecha a los EE.UU.

Hoy en día, el Husky Siberiano ha dejado de ser un perro de trabajo para convertirse en un animal de compañía.


Apariencia

El husky siberiano es un perro compacto, ligero y de tamaño mediano. Esta fisionomía lo hace especialmente indicado para el trabajo. Asímismo cuenta con un aspecto similar al del lobo, lo cual denota el carácter nórdico de los antecesores del husky, tal y como otras razas de perro tipo spitz.

La cabeza del huscky cuenta con un cráneo mediano y bien proporcionado, redondeado en la parte superior, con un stop bien definido.

Una de las carácterísticas que más llaman la atención de la raza son sus ojos, con forma de almendra. Pueden presentar varios colores, como el color pardo o el azul. Además, es posible que cuenten con un ojo de cada color, o los dos colores en un solo ojo.

El husky, cuenta con una expresión vivaz y amable, incluso traviesa. Sus orejas triangulares deben ser ligeramente redondeadas y cubiertas de pelo abundante.

En cuanto a la nariz, esta puede presentarse en diferentes colores. En el caso de perros grises, leonados y negros, su nariz debe ser negra. En el caso de perros cobrizos, debe ser de color hígado. Y de color carne en el caso de perros blancos.

La espalda del husky es recta y fuerte, contando con una línea superior nivelada, mientras que el lomo, tenso y delgado, sí que se encuentra ligeramente levantado. Los ejemplares de esta raza cuentan con un pecho profundo y fuerte, aunque no muy amplio.

Otro elemento muy llamativo en el husky es la cola del animal, la cual está cubierta de un pelaje abundante y denso. Normalmente puede ir sobre la espalda en forma de hoz, pero nunca enroscada hacia los constados o descansando sobre la espalda. Sólo cuando está en reposo, la lleva colgando.

La cola es muy característica de esta raza de perros y está cubierta de abundante pelo denso. Inserta justo debajo de la línea superior, la cola puede ir sobre la espalda en forma de hoz cuando el perro está en actividad, pero nunca enroscada hacia los costados o descansando sobre la espalda. Cuando el perro está en reposo, lleva la cola colgando.

El pelaje del husky le proporciona una gran resistencia al frío, aunque puede convertirse en un incoveniente en los climas más cálidos. Además, el pelaje del animal está compuesto por dos tipos de mantos: uno interior suave y denso, y otro externo con pelo recto y pegados al cuerpo.


Temperamento y carácter

El husky es un perro de mucha energía, por lo que requiere de mucho ejercicio al aire libre. Además, suele ser un perro hiperactivo, por lo que no resulta muy adecuado para personas sedentarias.

El husky es un perro que tiene a ser muy sociable, tanto con personas como con otros perros, por lo que no deberían ser utilizados como perros de guardia o protección. Sin embargo, para esto, es necesario que el proceso de socialización se haya efectuado correctamente desde cachorro.

Los ejemplares de esta raza, tienden a auyar y destrozar todo lo que se encuentran a su paso si se quedan solos durante mucho tiempo ya que se trata de un tipo de perro que requiere de mucha compañía, por lo que no deberemos dejarles aislados durante mucho tiempo.


Salud y cuidados

El husky es un perro muy sano desde un punto de vista genético, aunque sí que puede padecer de problemas de displasia de cadera o problemas oculares como cataratas, distrofia de la córnea o atrofia de retina. Por lo tanto, es recomendable efecuar radiografías de cadera o exámenes de vista para asegurarnos de que el perro recibe los cuidados necesarios.


El pelaje del husky siberiano no requiere de cuidados especiales, excepto durante las dos épocas de muda al año. En esas épocas es necesario cepillar al perro con frecuencia, usando un cepillo con cerdas metálicas.

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