Origen
El origen del Samoyedo cabe situarse en las tribus samoyedas que habitaban en el territorio comprendido entre el noroeste de Siberia y Asia Central. Estos pueblos nómadas viajajaban con sus perros quienes les ayudaban en labores de pastoreo y dándoles calor.
Los perros que se encontraban en las regiones sureñas eran negros, blancos y pardos y poseían un carácter más independiente frente a sus congéneres del sur, que poseían un frondoso pelaje blanco y eran mucho más dóciles.
Posteriormente, el explorador británico Ernest kilburn-Scott fue quien, durante sus investigaciones en el Ártico quedó cautivado por la belleza de estos canes, llevándose consigo un ejemplar que regalaría a su mujer, allá por 1889. Sería, de este modo, como se introduciría la raza en Europa.
Años más tarde, con ayuda de más exploradores, la raza fue expandiéndose por el mundo entero al cautivar a clases adineradas por su belleza y buen carácter.
Apariencia
El Samoyedo es un perro de tamaño mediano, elegante y resistente cuya morfología facial le hace tener un aspecto de estar sonriendo permanentemente.
Su stop (frente) está muy bien definida sin llegar a ser pronunciada. Su nariz es negra aunque pueden perder parcialmente el pigmento en determinadas épocas del año, conociéndose este fenómeno como "nariz de invierno".
Los ojos son de forma almendrada, disposición oblicua y color pardo oscuro. Las orejas son erguidas, pequeñas, triangulares, gruesas y redondeadas en las puntas.
El pelaje del Samoyedo está formado por dos tipo de pelo distinto: la externa, que es más densa y gruesa mientras que, la interna, está formada por un pelaje mucho más suave y menos denso.
Temperamento y carácter
A pesar de haberse originado en tierras muy duras, el temperamento de esta raza es muy agradable y sociable, suelen ser excelentes perros familiares y son capaces de adaptarse a todo tipo de condiciones.
Suelen ser muy amistoso tanto con personas como con otros perros. Además, al no poseer un alto instinto cazador, puede convivir sin problema con otras mascotas. No obstante, para conseguir un Samoyedo equilibrado y amistoso, es necesario comenzar con el proceso de socialización desde muy temprana edad.
Por si esto fuera poco, el Samoyedo es un perro muy fácil de adiestrar, ya que comprenden fácilmente las cosas que se les están enseñando. A pesar de que responden positivamente a toda clase de adiestramiento, su respuesta suele ser más rápida y eficaz cuando se utilizan métodos de adiestramiento en positivo.
Salud y cuidados
Por lo general, los Samoyedos son perros muy saludables. Sin embargo, entre las dolencias más frecuentes se encuentra: la displasia de cadera, la torsión gástrica o la sordera.
El pelaje debe ser cepillado al menos tres veces por semana para evitar enredos y mantenerlo en buen estado. En épocas de muda es necesario cepillarlo a diario.
Son perros, además, que requieren cantidades moderadas de ejercicio, por lo que es necesario sacarles a pasear con cierta frecuencia así como brindarles algún tipo de actividad para que puedan quemar la energía acumulada. Jugar con ellos o practicar deportes como el canicross pueden servirle tanto para quemar energía como para establecer un vínculo más fuerte con nuestra mascota.
Debido a su pelaje, son perros que se adaptan perfectamente a vivir en el jardín, en climas cálidos o fríos pero no toleran bien los climas cálidos. Además, se trata de perros que suelen vivir muy hermanados al ser humano, por lo que siempre estarán muy pendientes de su familia.
La raza se adapta bien a la vida tanto en campo como en ciudad. Si se le brinda suficiente ejercicio y paseos, puede adaptarse muy bien a la vida en departamento.
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